May 7, 2025
La hora de comer es una oportunidad perfecta para apoyar a su hijo desarrollo del lenguaje! Ya sea que tenga un niño pequeño que acaba de aprender a hablar o un niño en edad preescolar que está ampliando su vocabulario, las conversaciones cotidianas en la mesa pueden tener un gran impacto. Estas son algunas actividades sencillas de intervención temprana que los padres pueden utilizar para fomentar las habilidades lingüísticas mientras disfrutan de una comida juntos.
Hable sobre lo que hay en el plato con palabras descriptivas. En lugar de decir simplemente: «Aquí está tu manzana», prueba: «¡Aquí tienes tu manzana roja y crujiente! Es dulce y jugosa». Describir los colores, las texturas y los sabores ayuda a desarrollar el vocabulario y la comprensión.
Fomente la conversación haciendo preguntas que requieran más que una respuesta de sí o no. En lugar de «¿Te gusta la pasta?» prueba «¿Qué sabor tiene la pasta?» o «¿Cuál es tu parte favorita de la cena?» Esto ayuda a los niños a practicar la expresión de sus pensamientos y sentimientos.
Usa la hora de comer para practicar cómo nombrar y contar objetos. «¿Cuántas zanahorias tienes?» o «¿Puedes encontrar algo redondo en tu plato?» Esto hace que el aprendizaje sea divertido e interactivo, a la vez que refuerza los conceptos numéricos y las palabras nuevas.
Si su hijo dice una frase de dos palabras como «no más» y señala sus zanahorias, puede ampliar lo que dijo con una frase de tres palabras como «no más zanahorias». Esto reconoce que usted entiende su mensaje y, al mismo tiempo, proporciona un modelo de lenguaje más complejo.
La hora de comer es un buen momento para practicar habilidades de conversación, como turnarse para hablar y escuchar. Modele esto dejando que su hijo termine de pensar antes de responder. También puedes jugar juegos sencillos como «Yo espío» para fomentar la comunicación de ida y vuelta.
Las canciones y las rimas ayudan al desarrollo de la memoria y el lenguaje. ¡Intenta cantar una canción sencilla con temática gastronómica o inventa la tuya propia! «¡Estamos comiendo una sopa deliciosa, cucharada, cucharada, cucharada!» Cantar ayuda a los niños a escuchar el ritmo y los patrones del lenguaje.
Al utilizar estas sencillas actividades, los padres pueden convertir las comidas diarias en una oportunidad para trabajar desarrollo del lenguaje en la mesa. ¡Intenta no poner expectativas en este momento y diviértete!
Erin es patóloga del habla y el lenguaje que se especializa en terapia de alimentación, trastornos del sonido del habla y de la alimentación relacionados con hendiduras y craneofaciales, defensa de la AAC y tartamudez en la primera infancia.