May 7, 2025
Muchas familias se encuentran con momentos en los que ven a un niño y todo va bien, y luego sienten que, en un abrir y cerrar de ojos, ese mismo niño llora, grita, golpea, patea y/o grita. Para ayudar a reducir estas situaciones, una pregunta rápida a la que siempre podemos referirnos es: ¿Es sensorial o comunicativo?
La clave para diferenciar la desregulación basada en la comunicación y la regulación basada en los sentidos es si se puede identificar el «desencadenante». Por ejemplo, uno de los padres habla con otra persona y el niño tira de él o balbucea con él, pero el padre sigue hablando con su compañero de comunicación; entonces, el niño se enfada y se desregula. Este es un ejemplo de desregulación de la comunicación en el que el «desencadenante» sería que el niño intente comunicarse con sus padres pero no tenga las habilidades o el vocabulario para comunicarse con ellos. Por otro lado, la desregulación sensorial se produce cuando no se sabe cuál es el «factor desencadenante».
Reagan es patóloga del habla y el lenguaje en la Clínica Parkwood. Obtuvo una maestría en patología del habla y el lenguaje en la Universidad del Este de Washington.